El adulto promedio gana dos libras entre el Día de Acción de Gracias y la víspera de Año Nuevo. ¿Y quién les puede culpar con todas las delicias que solemos disfrutar en esta época del año?
Dos libras ni siquiera suena tanto. Pero aquí está el problema: A medida que envejecemos, nuestro metabolismo se ralentiza y se hace más difícil perder peso. Dos libras cada año comienzan a acumularse y pueden aumentar el riesgo de enfermedades relacionadas con el peso con el tiempo.
Eso no significa que deba abstenerse de todos sus platos favoritos durante la temporada navideña. Siga estos consejos para controlar un poco sus tentaciones dietéticas, y aún pueda disfrutar de golosinas de temporada sin sentir culpa o los riesgos para la salud.
Llénese de verduras. Llene primero su plato con verduras frescas y tendrá menos espacio para lo más pesado y las cosas que engordan. Todavía puede disfrutarlos, pero con moderación.
Combínelo con proteínas. Si los alimentos básicos para las fiestas con alto contenido de carbohidratos le tientan, combine una porción con proteínas como el pavo. Los carbohidratos simples se liberan en el torrente sanguíneo rápidamente, aumentando su nivel de azúcar en la sangre. Pero si no usa esa energía de inmediato, se almacenará como grasa. Combinar carbohidratos con proteínas ayuda a retrasar un poco la digestión y a mantener el nivel de azúcar en la sangre más nivelado.
Continúe haciendo ejercicio. Haga ejercicio a diario, incluso si solo sale a caminar un poco después de la cena. Dar vueltas alrededor del centro comercial mientras que hace las compras también cuentan.
Ejercite el control de las porciones. Si espera con ansia el pastel de nueces todo el año, no hay ninguna razón por la que deba omitirlo. Solo mantenga su porción pequeña. Aquí hay un truco útil: después de la cena y el postre, lávese los dientes. Estará menos tentado a repetir platillos, porque ahora el sabor estaría mal.
Beba agua durante todo el día. Las temperaturas han bajado, pero su cuerpo aún necesita hidratación. Continúe bebiendo agua durante todo el día, para no confundir la sed con el hambre. El agua ayudará a la digestión y le ayudará a sentirse más lleno.
Si aumenta algunas libras durante las festividades, hable con su médico acerca de sus preocupaciones. Él o ella pueden derivarlo a un nutricionista y ayudarlo a crear un régimen de ejercicio que sea apropiado para su nivel de salud y estado físico. Aún puede hacerse cargo del peso no deseado y proteger su salud a largo plazo.