Un virus no es lo único que se propaga por todo el país. Los estafadores han descubierto un nuevo potencial para estafar al público, desatando estafas de coronavirus a través de llamadas telefónicas y correos electrónicos.
Al 16 de agosto, la FTC había registrado 168,000 informes de estafas relacionadas con Covid-19 y/o pagos de estímulo. Dos tercios de esas quejas involucraron robo de identidad o fraude y las pérdidas reportadas han totalizado más de $110 millones hasta ahora.
Tenga cuidado con las versiones de estas estafas comunes.
Vacunas y tratamientos falsos. En los EE. UU., (todavía) no se ha aprobado ninguna vacuna contra el coronavirus. Además, no existen medicamentos de venta libre u otros tratamientos aprobados para prevenir o curar la infección. Si recibe una llamada telefónica, un correo electrónico o cualquier otra comunicación relacionada con estos elementos, ignórelo. Hable con su médico sobre la prevención o el tratamiento de Covid-19 y recuerde que los estafadores se aprovechan del miedo.
Intentos de robo de identidad. Si bien algunos estafadores simplemente pretenden venderle un producto fraudulento, muchos más comprenden el valor de su información personal. Recuerde estas reglas con respecto a los datos de su tarjeta de crédito, número de seguro social, fecha de nacimiento y más:
- Los estafadores pueden llamar desde números falsos, por lo que no puede confiar en lo que dice su identificador de llamadas.
- Si le preocupa el Seguro Social, Medicare, su cuenta bancaria o cualquier otra cosa, cuelgue el teléfono y devuélvale la llamada directamente al número que conoce.
- El Seguro Social, Medicare y otras agencias gubernamentales no lo llamarán ni lo enviarán por correo electrónico para pedirle información personal.
- Los enlaces en los correos electrónicos pueden dirigirlo a sitios web falsos que parecen reales y luego recopilar la información de inicio de sesión que ingresa. Vaya directamente a un sitio web e inicie sesión allí.
- Nadie le llamará ni le enviará un correo electrónico para “procesar” o “liberar” su pago de estímulo. Es casi seguro que estas llamadas o correos electrónicos son una estafa, y definitivamente no debe darles su información.
Si necesita información sobre la prevención o los tratamientos de Covid-19, un posible pago de estímulo o el estado de los beneficios de Medicare, llame directamente a sus expertos de confianza (como su médico, su profesional de impuestos o su representante de Medicare). En este momento, cualquier persona que le llame o le envíe un correo electrónico debe ser visto con sospecha, y debe pensarlo dos veces antes de realizar pagos o divulgar información a extraños.