Nadie disfruta de una estadía en el hospital, ya sea por una cirugía o algún otro tratamiento, pero al menos sabe que estará en las mejores manos. Pronto la odisea habrá terminado y volverá a su dulce hogar. Mientras tanto, un poco de planificación para su estadía en el hospital puede ser de gran ayuda para que su visita sea más segura y exitosa. Use esta lista de verificación para planificar, mientras sigue las instrucciones de su médico con precisión.
Consiga ayuda. Planifique que alguien lo lleve y traiga del hospital, y que se quede con usted unos días después de volver a casa. Esta puede ser una persona o varios ayudantes.
Manténgase en contacto con su médico. Pregunte sobre sus medicamentos habituales y si deben ajustarse antes del procedimiento. Si desarrolla sarpullido, fiebre o enfermedad, notifique a su médico de inmediato.
No coma ni beba Se le indicará que se abstenga de comer o beber durante un período de tiempo específico antes del procedimiento. Seguir estas instrucciones puede protegerlo de complicaciones.
Prepárese. Probablemente sea una buena idea banarse antes de ir al hospital. En este momento, quite todo el maquillaje y el esmalte de uñas. Use ropa suelta y cómoda, y saquese los lentes de contacto si los usa. Coloque sus lentes de contacto en un estuche etiquetado con su nombre.
Empaque. Empaque los medicamentos si su médico le indicó que los traiga. Recuerde llevar los artículos necesarios para su funcionamiento diario, como anteojos, lentes de contacto o audífonos. También puede empacar artículos de comodidad, como una bata, pantuflas y materiales de lectura. ¡Recuerde sus tarjetas de seguro!
No se moleste en empacar estos artículos. No use joyas, no traiga tarjetas de crédito o grandes cantidades de efectivo. Estos artículos pueden perderse fácilmente en el hospital. Si fuma, no se moleste en traer cigarrillos; todos los hospitales prohíben fumar, y de todos modos perjudicará su proceso de curación.
Prepare su Directiva Anticipada. Si aún no ha preparado una Directiva Anticipada con su abogado, tómese el tiempo para hacerlo. Llévelo con usted o presente un archivo con su médico (y el hospital) antes de la fecha de su procedimiento.
Ingresar al hospital para una cirugía o tratamiento puede ser estresante, pero recuerde: está en manos capaces y bien entrenadas. Siga todas las instrucciones de su médico cuidadosamente, y pronto su estadía en el hospital será un recuerdo lejano.